APRENDIENDO

Crecimiento de la planta que nos da alimento
Plantar una semilla es como ponerla en una incubadora. Un lugar oscuro bajo la tierra, cálido y rodeado de nutrientes y humedad que activan un proceso de germinación para hacer que la semilla despierte a la vida. Poco tiempo después de plantar la semilla, ésta se abre y emerge un pequeño tallo suave. De ahí se convierte en plántula y poco a poco va tomando fuerza, fortaleciéndose el tallo y desarrollando hojas.
Con un poco más de tiempo y cuidados, estará lista para que la disfrutes. Puedes comerlas solas, usarlas para un jugo o prepararlas en nuestra rica ensalada del huerto.
Ensalada del huerto
Ingredientes
* 3 tz de vegetales cosechados del huerto (zanahorias, betabeles, lechugas,
acelgas y espinacas)
* Hierbas aromáticas como menta o albahaca
* El jugo de un limón
* Sal de mar al gusto
* 1 cda de aceite de oliva extra virgen
Preparación
Enjuaga y desinfecta los vegetales para quitar restos de tierra que puedan
tener. Parte éstos en tiritas o cuadritos, o simplemente, en el caso de hojas verdes, pártelas con la mano en trozos medianos. Mezcla todos los ingredientes con la sal, el limón y el aceite. Decora con un poco de semillas de girasol o ajonjolí. Un lugar oscuro bajo la tierra, cálido y rodeado de nutrientes y humedad que activan un proceso de germinación para hacer que la semilla despierte a la vida. Poco tiempo después de plantar la semilla, ésta se abre
y emerge un pequeño tallo suave. De ahí se convierte en plántula y poco a poco va tomando fuerza, fortaleciéndose el tallo y desarrollando hojas.
Puedes comerlas solas, usarlas para un jugo o prepararlas en nuestra rica ensalada del huerto.

Artículos destacados