Una empresa o negocio tiene muchas cosas en común con una familia. La familia es un grupo de personas con una misma historia que están unidos por el amor. De la misma manera, una empresa está compuesta por un grupo de personas unidas por un mismo objetivo.
En una empresa se hace una planeación de lo que se debe hacer en cada área para que funcione exitosamente. Se asignan responsabilidades a los diferentes miembros y se establecen reglas a seguir.
¿Te suena?
En la familia también se hace un plan de vida y se toman decisiones como ¿dónde vivir?, ¿cuántos hijos tener?, ¿en qué escuela estudiarán?, entre muchas otras. Además, se asignan responsabilidades a sus miembros para que todo funcione en armonía.
Y así como en una empresa hay un director que motiva a sus colaboradores para que cumplan con sus responsabilidades, en la familia también debe haber una dirección, que por lo general son los padres, quienes guían a sus hijos para que den su mayor esfuerzo y alcancen sus metas.
Es normal que pueda haber conflictos en cualquiera de las dos, sin embargo, con una comunicación abierta y respeto entre sus miembros, todo se puede resolver.